Dios te llama a seguir avanzando

Dios te llama a seguir avanzando

Hay tiempos de crisis, de lamento pero también hay tiempos donde Dios nos desafía a levantarnos y tomar la victoria.

Todos tenemos un plan especialmente diseñado por el Señor.

Es por eso que nuestra vida aquí no es un accidente sino que hay un plan por descubrir

En Efesios 2:10 las Escrituras declaran que Dios ha dispuesto de antemano buenas obras para nosotros.

Aunque hoy veamos conflicto, errores y destrucción, los planes del Señor no se rinden.

¡Dios tiene un futuro feliz! Si decides creerle y seguirlo. Tal como en Gales, por el año 1904 Evan Roberts veía ante sus ojos la respuesta de sus oraciones y uno de los grandes avivamientos comenzaba a ocurrir, así hoy podemos declarar que lo que vemos como destrucción y caos puede transformarse en paz y armonía.

¡Dios es capaz de revertir cualquier situación! La llave hacia lo milagroso está en la fe y en la oración.

Tú también puedes ser parte de un avivamiento. Solo debes levantarte, quitarte las quejas y el lamento de encima y revestirte de fe y clamor por las almas que todavía no conocen a Jesús.

Dios ha preparado obras, de antemano, para que anduviésemos en ellas en este tiempo.

Un avivamiento produce conversión espiritual. Es dejar de actuar de forma egoísta para darle lugar a Dios en nuestra vida.

Es sentir la libertad de no autodestruirnos sino de buscar lo que nos lleve a la plenitud espiritual.

En el quinto libro de la Biblia, en Deuteronomio 34:10-12 vemos el contundente testimonio de Moisés.

El mayor de los profetas que, como se declara, fue quien conoció a Dios, cara a cara.

El gran libertador que renunció a ser considerado hijo de la hija del Faraón del imperio más grande de la época, y gozar de los deleites temporales para vivir en un desierto pensando que su vida era un error.

Aunque hayas vivido mucho, todavía hay más por descubrir! Sigue adelante, sigue confiando, porque Dios hará prosperar tu camino!

Fue así como con una gran victoria, al borde del Jordán, Dios le mostró de lejos la tierra que conquistaría la próxima generación.

Y allí se levantó Josué, su siervo (Josué 1:1-9) para prepararse a cruzar hacia la victoria.

Si Dios te ha prometido algo, confía porque aunque del otro lado se levanten gigantes, siempre está a tu lado y cumple su Palabra.

¡Vienen tiempos de ver los cielos abiertos y de vivir una comunión especial con su Espíritu Santo!

Moisés guio al pueblo (cerca de 1.000.000 personas que habían nacido como esclavos) hasta el límite de la tierra prometida.

Desde allí, Dios levantó a Josué para que continuara la obra. ¡Por cierto que este era un gran desafío!

No solo debía continuar la obra del mayor profeta de todos los tiempos, sino que había que cruzar un río de 20 mts. de ancho por 10 mts. de profundidad.

Y por si fuera poco, del otro lado, lo esperaba una ciudad fortificada en la cual habitaban gigantes.

¿Cuántas veces nos podemos sentir descalificados y faltos de oportunidades?

¿Te has sentido menos que otros?

En La Biblia vemos que la comparación es dañina.

Pues si te comparas con alguien que, a tu criterio es mejor que tú, te sentirás de menor valor y si, por el contrario, te comparas con alguien que hace todo mal, entonces te llenarás de arrogancia.

Para alcanzar lo que Dios tiene por delante, busca poner la mirada en Jesús y sigue su ejemplo!

En Josué 1:11, vemos como el líder le comunica al pueblo de Israel que era tiempo de prepararse para la conquista.
Y conocemos la historia, que aunque Moisés fue el gran profeta, Josué pudo liderar muy bien a la siguiente generación, con la cual cruzó el río, derribó murallas y venció gigantes.

Si Dios está de tu lado y te envía a cumplir un plan, de seguro que tienes la victoria de tu lado!

Ha llegado el tiempo de levantarte y tomar la tierra que el Señor ha dispuesto para ti!

¡No tengas miedo, no te paralices, no tengas vergüenza porque Él está contigo!

Así como estuvo con ellos, con hombres y mujeres que le creyeron, Dios también está contigo.

Y, por último en Josué 2:9-10 vemos que antes de la conquista, los espías hablaron con una nativa de aquél lugar que le confesó que los gigantes, aunque parecían tan terribles, en realidad estaban aterrados porque sabían que los Israelitas venían de la mano del Dios Omnipotente.

Detrás del gran muro, estaban todos atemorizados porque sabían que del otro lado venía la conquista absoluta. No tengas temor porque del otro lado saben que vienes tomado de la mano del Gigante de Israel !

Este es el tiempo de avanzar, de entrar en la promesa.

Que este mes sea un tiempo de preparación espiritual para la conquista que se avecina.

Busca al Señor en ayuno y oración y prepárate para un tiempo nuevo y poderoso!

¡Dios te llama a seguir avanzando!

No permitas que en el campo de batalla contra uno mismo surja el temor o la intimidación.
Aférrate de la mano de tu Creador y confía porque ¡es tiempo de levantarse para seguir avanzando!

Texto: Efesios 2:10 y Josué 1:1-11

 ♔ Silvina