Pastores pastoreados
Mi consejo es el siguiente: Cuiden ustedes de las personas que Dios dejó a su cargo, pues ellas pertenecen a Dios. Cuídenlas, como cuida el pastor a sus ovejas.
Háganlo por el gusto de servir, que es lo que a Dios le agrada, y no por obligación ni para ganar dinero. 1 Pedro 5:1-3 (TLA)
Un dicho irónico acerca de la medicina es ¿Quién examina a los doctores?
Del mismo modo, se puede decir, aunque sin ironía pero con preocupación,
¿Quién pastorea a los líderes y ancianos en las iglesias?
Y más aún ¿Qué significa pastor pastoreado?
En 1 Pedro 5:1-3 se lee el ruego de Pedro dirigido a los ancianos:
“apacentad la grey” (v. 2).
Un anciano es una persona que tiene la madurez espiritual suficiente y llamado por el Espíritu Santo para cuidar y supervisar a la iglesia.
No es una gestión administrativa sino de servicio espiritual sobre las personas.
Por lo que las exigencias del llamado resultan muy altas en las Sagradas Escrituras.
Efesios 4:11 dice que Cristo
“constituyó a unos…pastores y maestros” ,
Esto implica un cuidado tierno y una supervisión llena de atención (Vine).
Cristo Jesús y en su mismo ejemplo se ama y cuida del rebaño.
Amar y cuidar del rebaño implica grandes sacrificios en el amor del Señor.
No sólo se es anciano cuando se enseña la sana doctrina .
El anciano está enterado de lo que le ocurre a las ovejas y las pastorea con amor.
Las reprende cuando es necesario y las restaura en la unidad del cuerpo de Cristo.
Ora por ellas y con ellas y las acompaña, en general, en su peregrinar por esta vida.
No se pastorea sólo desde el púlpito.
Allí se enseña, se exhorta y se guía en la sana doctrina.
Pero el púlpito no es lugar para pastorear a los hermanos como la Biblia dice que debe hacerse.
Los hermanos son pastoreados en la oficina, en sus propias casas, en el pasillo de la iglesia, en el hospital y en las graduaciones.
Pablo clamaba:
“y además de otras cosas, lo que sobre mí se agolpa cada día, la preocupación por todas las iglesias
¿Quién enferma y yo no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno? (2 Corintios 11:28-29).
Miles de siervos del Señor son diariamente tentados sin que nadie se percate ni se interese por ello, y peor aún, sin que el propio anciano o líder se apresure a ser pastoreado por otros líderes.
Quizá es el orgullo, la vanidad, la que arrastra a los siervos de la iglesia lejos del consejo oportuno de otros hermanos, que a su vez están siendo pastoreados por otros.
Cristo llamó a doce y todos vivían en comunidad.
En cierta ocasión envió discípulos de dos en dos.
Todo el texto sagrado revela ese propósito de comunidad y hermandad entre creyentes que a Dios le agrada que exista.
Si eres líder , anciano o pastor tienes que hacerte al menos dos preguntas:
¿Estás pastoreando a los hermanos?
¿Eres pastoreado?
Pablo pastoreó a Timoteo como un padre espiritual en el amor de Cristo:
“pelea la buena batalla de la fe” (1 Timoteo 6:12),
“Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina” (1 Timoteo 4:16),
“ya no bebas agua, sino usa de un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades”
Tenemos que ser humildes y reconocer que tenemos necesidad de ser pastoreados porque ese es parte del modelo bíblico del servicio cristiano.
Juan Paulo Martínez